16 Maio 2012
Apagaron la voz de Alfredo Villatoro
El gremio periodístico y la sociedad hondureña en general se encuentran de luto. Lo que más se temía, lamentablemente pasó. La voz del periodista Ángel Alfredo Villatoro (47) fue callada para siempre de una forma cobarde.
El gremio periodístico y la sociedad hondureña en general se encuentran de luto. Lo que más se temía, lamentablemente pasó. La voz del periodista Ángel Alfredo Villatoro (47) fue callada para siempre de una forma cobarde.
En el bordillo de la calle dejaron el cuerpo del periodista Alfredo Villatoro.
Hoy una familia queda destrozada, aquel hombre quien era padre, esposo e hijo se fue para siempre de forma intempestiva, al serle arrebatada la vida arrasado por la enorme ola de criminalidad que flagela a Honduras.
Tras conocer la noticia, la conmoción se hizo general en una sociedad ávida de tener una mejor nación, donde puedan caminar libremente sin pensar en ser presa de la delincuencia.
Quienes conocieron a Alfredo Villatoro, lo describen como un hombre carismático, un excelente profesional y calidad de persona; lo que hace difícil poder pensar en las razones que tuvieron los criminales para quitarle la vida.
Su cuerpo fue encontrado en un solitario sector de la residencial Las Uvas al sureste de la capital, en una zona donde todavía no hay casas construidas, sino únicamente solares baldíos.
Personal de Medicina Forense en el levantamiento.
El cuerpo del periodista estaba tirado boca arriba a orilla de la calle pavimentada, los criminales lo vistieron con indumentaria policial y presentaba al menos dos disparos de bala en la sien derecha.
El hallazgo de su cadáver se registró aproximadamente a las 9:00 de la noche, por los vecinos de la mencionada residencial, quienes inmediatamente dieron aviso a la Policía Nacional.
Preliminarmente se especuló sobre si se trataba o no de Alfredo Villatoro, debido a que su rostro estaba cubierto con una pañoleta roja y vestía una fatiga (uniforme) igual a las utilizadas por los elementos del Comando de Operaciones Especiales Cobras.
ESCUCHARON DISPAROS
Vecinos del lugar dieron a conocer que aproximadamente a las 7:00 de la noche escucharon unas cinco detonaciones de arma de fuego y que horas más tarde descubrieron el cuerpo. Minutos después se hicieron presentes a la escena del crimen varios agentes de investigación asignados a la Unidad de Inspecciones Oculares, así como personal de Medicina Forense.
Los restos son trasladados a la morgue capitalina.
En el lugar los investigadores encontraron varios casquillos de bala y de acuerdo a testimonios de personal de Medicina Forense, tenía pocas horas de haber sido ultimado. Los detectives que manejaron la escena del crimen, por las características de la víctima, rápidamente se enteraron que se trataba del comunicador, pero no le informaron a nadie.
El levantamiento del cadáver fue rápido, posiblemente por órdenes superiores e inmediatamente fue trasladado a la morgue de Medicina Forense, donde un grupo de periodistas aguardaba para confirmar la noticia.
La primera persona en llegar a la morgue fue el vocero de la Secretaría de Seguridad, Héctor Iván Mejía, seguido de la directora de fiscales, Danelia Ferrera, quien se llamó al silencio, argumentando que estaba trabajando.
A las 10:00 de la noche el portavoz policial dio las primeras declaraciones, donde confirmó que en efecto la persona que había sido encontrada sin vida era el comunicador Alfredo Villatoro.
Algunos familiares del comunicador, tras conocer la infausta noticia, también llegaron a la morgue. Su dolor y desconsuelo era evidente, sus ocho días de espera no pudieron tener un peor final.
Familiares y periodistas esperan que hagan la autopsia en la Morgue Judicial.
En cuestión de minutos el lugar también fue abarrotado de decenas de periodistas y amigos de Alfredo Villatoro, quienes impotentes y evidentemente apesarados exigían justicia por la muerte del comunicador.
OCHO DÍAS SECUESTRADO
Alfredo Villatoro fue secuestrado el pasado miércoles 9 de mayo, después de las 4:45 de la mañana que salió de su casa de la colonia San Ignacio y se dirigía a su centro de trabajo, la cadena de radio HRN, a bordo de su vehículo, un turismo gris, marca Kia Picanto, sin placas.
El profesional de la comunicación se desempeñaba como coordinador de noticias en HRN y entraba a sus labores a las 5:00 de la mañana, donde abría la programación junto a su compañero Juan Carlos Barahona.
Se conoció que ese día al no llegar a la hora acostumbrada, Barahona trató de comunicarse con él y al no obtener respuesta positiva llamó a sus familiares, quienes le informaron que había salido hacía un rato.
Los compañeros y compañeras estaban desconsolados.
Sus familiares y compañeros al darse cuenta de lo sucedido salieron a buscarlo y minutos más tarde encontraron su vehículo abandonado, estacionado a orillas de la calle principal de la colonia Florencia Norte de Tegucigalpa, a inmediaciones de la conocida farmacia Senros.
Preliminarmente la Policía manejó el hecho como un rapto, pero posteriormente indicaron que se trataba de un secuestro, debido a que todos los indicios encontrados apuntaban en esa dirección.
Los familiares jamás denunciaron el secuestro ante las autoridades de la Policía Nacional, por temor a que los malvivientes pudieran atentar contra la vida de él.
Es así que se desconoce hasta la fecha si los maleantes se comunicaron o no con la esposa de Villatoro, para solicitarle algún tipo de rescate, aunque fuentes ligadas a la Policía indicaron que estaban pidiendo rescate.
Es de resaltar que el sábado anterior, la esposa del periodista, Karla Fonseca, se comunicó a HRN y les pidió a los secuestradores que liberaran a su esposo en las vísperas del Día de la Madre.