19 Agosto 2005
Designan fiscal por ataques a periodistas en estado mexicano
MEXICO - La Procuraduría General de la República (PGR) designó a un fiscal especial ante los ataques, incluso asesinatos, cometidos contra periodistas en el estado norteño de Sinaloa, donde desde hace años se ha registrado una ola de violencia relacionada con el tráfico de drogas.
MEXICO - La Procuraduría General de la República (PGR) designó a un fiscal especial ante los ataques, incluso asesinatos, cometidos contra periodistas en el estado norteño de Sinaloa, donde desde hace años se ha registrado una ola de violencia relacionada con el tráfico de drogas.
La fiscalía "tiene como propósito contribuir a proteger la libertad de expresión de los representantes de los medios de comunicación, para que estén en posibilidad de cumplir con el compromiso de mantener a la sociedad verazmente informada", señaló la PGR en un comunicado.
El agente Antonio Manuel Pérez Martínez fue nombrado en el cargo, el primero en los 32 estados del país, luego de que el presidente Vicente Fox prometiera en mayo que se designarían fiscales especiales ante varios asesinatos de periodistas.
La promesa de Fox fue hecha durante una reunión con la Asociación de Editores de Periódicos de México, que le demandaron mayores esfuerzos para detener la violencia contra reporteros.
A principios de abril de 2005 fueron asesinados a tiros la reportera de radio Guadalupe García Escamilla, en la ciudad norteña de Nuevo Laredo, y Raúl Gibb Guerrero, director del diario La Opinión de Veracruz, estado del Golfo de México.
Otro periodista, Alfredo Jiménez Mota de El Imparcial de Sonora, se encuentra desaparecido desde abril, aparentemente por investigaciones periodísticas sobre el narcotráfico en ese estado del norte del país.
La fiscalía se creó justamente en Sinaloa, el estado donde se asienta el Cartel del narcotráfico que encabeza el fugado capo Joaquín "El Chapo" Guzmán, y a quien las autoridades responsabilizan de una ola de violencia que se ha recrudecido en los últimos meses y se ha traducido en cientos de asesinatos.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos consideró en julio pasado que el 2005 ha sido un "año negro" para los periodistas.
Refirió que tan sólo entre enero y julio han ocurrido siete homicidios de reporteros y comunicadores.
La PGR ya había puesto en operación hace unas semanas una línea telefónica para recibir denuncias de periodistas agredidos.