Miami (1 de agosto de 2012).- La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) calificó de “contraria a los principios de libertad de expresión y de prensa” la orden del Gobierno de Ecuador de retirar la publicidad oficial de los medios de comunicación independientes. Asimismo la organización hemisférica expresó su preocupación por el allanamiento y embargo de bienes de la revista Vanguardia y las amenazas de cierre contra la organización Fundamedios.
El presidente Rafael Correa anunció el 28 de julio que ordenaba a sus funcionarios suspender la colocación de publicidad oficial en varios medios privados en represalia por la línea crítica que mantienen sobre las acciones de gobierno. La orden pesará sobre aquellos medios independientes, entre ellos, a los diarios Hoy, El Comercio, El Universo, La Hora y a las televisoras Ecuavisa y Teleamazonas.
En junio pasado, la SIP y otras organizaciones internacionales y nacionales de prensa criticaron a Correa por ordenar a sus ministros y funcionarios que no brinden entrevistas a medios.
El presidente de la SIP, Milton Coleman, editor senior del diario estadounidense The Washington Post, dijo que en la “SIP venimos sosteniendo que la discriminación en el otorgamiento de la publicidad oficial para beneficiar a unos medios y castigar a otros es una forma antojadiza de usar los dineros públicos, práctica contraria a la Declaración de Chapultepec y a la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos”.
Coleman recalcó que de acuerdo con fallos judiciales en otros países y con normas internacionales, “los gobiernos deben tener criterios técnicos y transparentes para la distribución de publicidad oficial, y que el objetivo de esa publicidad es para beneficiar el conocimiento de los ciudadanos en asuntos de interés público”. Bajo ese concepto, agregó que “en Ecuador los medios independientes y privados tienen una gran cobertura y penetración, por lo que no se puede desconocer que son vehículos excelentes de información para los ciudadanos”.
En otra medida dispuesta ayer, funcionarios del Ministerio de Relaciones Laborales allanaron la sede en Quito de la revista Vanguardia e incautaron computadores, muebles y otros bienes. El allanamiento fue justificado por el incumplimiento de una sanción administrativa respecto a que el medio no ha cumplido con la cuota de personas discapacitadas entre su personal. Sin embargo, el editor general de la revista, Iván Flores Poveda, argumentó que la empresa ha presentado pruebas legales en contrario.
En diciembre de 2010, Vanguardia sufrió otro allanamiento, alegándose una deuda sobre el alquiler de su sede. En esa oportunidad, fueron registradas las oficinas, incautándose varias computadoras de los periodistas.
La SIP también viene siguiendo las acusaciones gubernamentales y amenazas de cierre en contra de la Fundación Andina para la Observación y Estudio de Medios (FUNDAMEDIOS), y en contra de su director César Ricaurte. Fundamedios, organización sin fines de lucro dedicada al monitoreo de la libertad de prensa en el país, es acusada por el gobierno de practicar actividades desestabilizadoras en el país.
La SIP es una entidad sin fines de lucro dedicada a la defensa y promoción de la libertad de prensa y de expresión en las Américas. Está compuesta por más de 1.300 publicaciones del hemisferio occidental; y tiene sede en Miami, Estados Unidos. Para mayor información, por favor, visite http://www.sipiapa.org