05 Abril 2010
Reynosa, atrapada en el silencio
Hoy saldré temprano porque hay balacera, asegura la mujer joven y de rasgos morenos que en su caminar se asoma la impaciencia. - ¿Es común que salga temprano de trabajar?. Casi más veces en este año. Cada vez que hay balacera nos dejan ir más temprano, porque luego no hay peceras ni taxis, detalla la mujer de cuerpo un poco grueso, sonrisa amable, ojos grandes y trato sencillo.
Hoy saldré temprano porque hay balacera, asegura la mujer joven y de rasgos morenos que en su caminar se asoma la impaciencia.
- ¿Es común que salga temprano de trabajar?.
Casi más veces en este año. Cada vez que hay balacera nos dejan ir más temprano, porque luego no hay peceras ni taxis, detalla la mujer de cuerpo un poco grueso, sonrisa amable, ojos grandes y trato sencillo.
Trabaja en un restaurante de la ciudad de Reynosa, Tamaulipas, donde los días ya se hicieron más cortos, porque los enfrentamientos armados entre bandas de narcotraficantes, o algunos de estos con soldados del Ejército, han roto la cotidianidad del trabajo, la asistencia a escuelas y las rutinas familiares convirtiendo a los habitantes (más de 550 mil según cifras oficiales del INEGI) en rehenes de una esquizofrénica violencia que en los tres primeros meses de 2010 ha crecido a niveles desconocidos. LEA LA NOTA COMPLETA EN: http://geografiaderiesgos.blogspot.com/