REPUBLICA DOMINICANA
En este período, la prensa, tanto radial, escrita como televisiva, disfrutó de un clima propicio para desenvolverse en un marco de libertad, sólo ensombrecido por esporádicas acciones o pronunciamientos de algunos funcionarios y autoridades, así como por representantes del sector privado que no comprenden ni aceptan la función del periodismo.
Un ejemplo reciente de ello fue la publicación de una serie de trabajos en el periódico El Caribe que llevaron al Gobierno a depurar y reestructurar todo un sistema de fichas criminales en el cual figuraban reputados periodistas hasta por simples antecedentes judiciales de haber sido demandados por supuesta violación a la Ley 6132 de expresión y difusión del pensamiento. A propósito de esta vieja legislación, el presidente Leonel Fernández designó por decreto una comisión que tendrá la responsabilidad de recomendar al Poder Ejecutivo las iniciativas que estime convenientes para reformar la ley vigente. La comisión la encabeza el presidente de la SIP y director del diario El Día, doctor Rafael Molina Morillo.
Tres casos que merecen mención, y cuyas investigaciones no han tenido hasta ahora resultados concluyentes, fueron las amenazas de muerte denunciadas por los periodistas Julio Martínez Pozo, del programa matinal de comentarios, El Gobierno de la Mañana y de Julián Herrera. El segundo dijo que sectores militares lo mantenían bajo amenaza y persecución, luego de que hizo pública la supuesta existencia de una estructura mafiosa que estaría operando en algunos estamentos de instituciones castrenses. A varios meses de la agresión a tiros realizada por desconocidos contra la sala de Redacción del noticiario de televisión SIN, tampoco las autoridades han dado con los responsables de ese hecho.
Continúa la impunidad sobre tres crímenes que han quedado hasta ahora sin una sanción definitiva de la justicia.
Este 17 de marzo se cumplen 32 años del asesinato del periodista Orlando Martínez, asesinado a tiros en 1975. A pesar de que los acusados del crimen fueron condenados a 20 años, no existe una sentencia final y el proceso aún se ventila en un tribunal de apelación. Los autores intelectuales aún permanecen impunes.
El 28 de marzo se cumplen 34 años del asesinato del periodista Gregorio García Castro, quien era jefe del vespertino Última Hora, donde escribía su columna En un Tris. Este crimen permanece sumido en la más absoluta impunidad.
Otro crimen sin castigo es la desaparición del periodista y profesor Narciso González (Narcisazo), del cual se cumplirán 13 años el 26 de mayo próximo. Narcisazo desapareció después de criticar la gestión del entonces presidente Joaquín Balaguer y en medio de denuncias de fraude durante las elecciones presidenciales del 1994.